“El ciclo de los tramposos es siempre el mismo: no me dopo, nunca he dado positivo en un control, hay una campaña contra mí, demandaré al que ponga mi nombre en cuestión, las pruebas son falsas, yo no quería, todos hacen lo mismo. Es igual: un tramposo. Y de marca mayor, porque ha sacado una ventaja astronómica en la parte económica y ha actuado como un capo sin escrúpulos en el pelotón. Lo peor es que la mayoría de los ciclistas se manifestaron a favor suyo incluso después del demoledor informe de la USADA (US Anti-Doping Agency)
En el informe se dice textualmente que Armstrong se benefició de un sistema de dopaje sin comparación en la historia del deporte. Supongo que sería un poco menos potente que el de la antigua RDA, pero la precisión de la AMA dice bastante de la ventaja que obtenía Armstrong incluso en las ayudas de las drogas. Él lo niega. También negaba que se dopaba.
El ciclismo está muy herido, pero hay una gran pasión en los aficionados. Eso es básico. Probablemente comenzará una campaña hablando del nuevo ciclismo, del ciclismo limpio. Por desgracia, tengo muy pocas esperanzas. He escuchado eso demasiadas veces, sobre todo en España, que ha sido -quizá lo sea todavía- un paraíso para los tramposos y sus secuaces”
Santigo Segurola en las charlas del Diario MARCA 21-Ene-2013